viernes, 1 de febrero de 2013

La planificación

Esto es algo que si lo aprendemos correctamente, no vas a servir a lo largo de nuestra vida y en nuestro trabajo a la hora de trabajar con los diferentes colectivos. Es por esto, por lo que la didáctica resulta muy útil para la Educación Social. La planificación la podemos dividir en plan, programa y proyecto, citados de mayor a menor grado. Nosotros nos centraremos solo en el proyecto, que es donde se verán los objetivos a corto plazo. Cuando existen un conjunto de proyectos se les denomina programa, y un conjunto de programas se trata de un plan.

El plan dependerá del programa y el programa del el programa del proyecto, ya que se integran unos a otros. Para finalizar la asignatura de didáctica debemos elaborar un proyecto, así que a continuación voy a explicaros el concepto.

El proyecto se trata de un conjunto de actividades que tienen el mismo fin, éste fin es el de crear competencias profesionales o personales en el individuo o grupo a los que vayan dirigidos para cubrir sus necesidades educativas. Para ello tenemos tres tipos de proyectos:

  • Proyecto preventivo.
  • Proyecto auxiliar.
  • Proyecto terapéutico.

A continuación describiré cada uno de ellos. El proyecto preventivo, como su propio nombre indica, tiene el objetivo de prevenir, es decir, evitar conductas distorsionadas dentro de los grupos. Este tipo de proyecto sería, por ejemplo, dar charlas sobre el uso del preservativo. El proyecto auxiliar tiene el objeto de complementar a otros procedimientos educativos. Un ejemplo de este tipo sería la educación a personas con discapacidad mental. Y por último, el proyecto terapéutico tiene la intención de socializar al individuo o grupo, como por ejemplo la intervención con niños conflictivos. 

Mi proyecto va dirigido a niños con obesidad infantil. En él intentaremos reeducar a los niños en cuanto alimentación y actividad física. Si tenemos en cuenta esto, mi proyecto será preventivo, ya que intentaremos evitar males mayores en cuanto a la salud en los niños, pero también será auxiliar porque los niños recibirán una educación complementaria sobre cómo llevar una vida saludable.

Lo que se pretende hacer con este tipo de proyectos es cubrir una serie de necesidades de los individuos o grupos a los que se trata. Debe cubrir siempre una necesidades básicas, como son las que aparecen en la pirámide de Maslow, la cual aparece en la imagen de la izquierda.



El proyecto, como ya he comentado, está compuesto por un conjunto de actividades, pero en él también se incluyen: método, contenidos, objetivos y evaluación. Para que el proyecto sea adecuado y se lleve a cabo correctamente, tenemos que saber adaptarlo al modelo de enseñanza-aprendizaje que vamos a utilizar, y sobre todo, una de las cosas más importantes para mí, es que debe ser viable. Todo esto surge porque se identifica un problema en un individuo, grupo o colectivo y hay que darle una solución, pero para ello hay que pasar por una serie de fases. 

Primero está la fase previa o de diagnóstico, que trata de hacer un estudio completo del individuo o grupo a tratar. En mi proyecto, debemos observar el entorno de los niños, es decir, de dónde les vienen esos malos hábitos físicos y alimenticios, y las mismas personas, ya que puede darse por un factor biológico. A veces estas necesidades pueden ser percibidas porque los niños manifiestan esos problemas, o bien, no percibidas si son no manifestadas.

En segundo lugar, encontramos la fase de planificación o elaboración del diseño curricular, al que llegamos cuando ya tenemos suficiente información extraído de la fase de diagnóstico. Con esta fase pretendemos: concretar todos los elementos a tener en cuenta, como por ejemplo los personales, realizar previamente las orientaciones y los métodos de actuación, definir el papel que tiene cada individuo e intentar visualizar las posibles situaciones para elaborar estrategias correctivas.

Seguidamente, después de estudiar minuciosamente todo lo anterior, definimos cada objetivo para llevar a cabo el proyecto. Los objetivos pueden ser de tres tipos:

  1. Objetivos Generales.
  2. Objetivos Específicos.
  3. Objetivos Operativos.

Los objetivos generales nos ofrecen una visión global sobre qué es lo que vamos a intentar conseguir con el grupo. Con los niños con obesidad,  nuestro objetivo general es dotar de las capacidades y conocimientos necesarios a los niños para un mejor desenvolvimiento en la vida cotidiana y personal. Dentro de este objetivo encontramos los específicos, actitudinales, conceptuales y procedimentales. Todos ellos parten desde el punto de vista de los educadores sociales.

Los operativos especifican más sobre las metas a conseguir, aunque siempre desde el punto de vista de los niños que vamos a tratar: hacer ejercicio físico de forma divertida por medio de juegos para adquirir nuevos hábitos de comportamiento saludables.

Los contenidos son un conjunto de conocimientos y experiencias ofrecidas al grupo para que se puedan conseguir los objetivos planteados. Como los objetivos, también pueden ser actitudinales, conceptuales y procedimentales.

La metodología ayuda a llevar a cabo la acción educativa. Con la metodología nos plantearemos como se llevarán a cabo las actividades (el lenguaje utilizado, las estrategias...). Para que se de un ambiente educativo adecuado, el educador deberá relacionar la actividad con la vida real y fomentar el trabajo y las relaciones sociales en el grupo, por ello, en mi proyecto, los niños siempre trabajarán en grupo para no dejar lugar a la discriminación y fomentar la integración.

A la hora de desarrollar las actividades, se deberá tener muy en cuenta el punto anterior, es decir, la metodología, y sobre todo los medios y los recursos de los que vamos a disponer. Estas actividades tendrán que tener coherencia con los objetivos anteriormente planteados. Para los niños con problemas de obesidad, hemos elaborado un programa de cuatro semanas en las que se intercalarán actividades físicas y con carácter alimenticio, ambas tienen que ver con todos nuestros objetivos descritos. También hemos tenido en cuenta la edad de los niños al que va dirigido el proyecto, ya que no poseen la misma madurez que las personas mayores.

Los medios y recursos se basan en los materiales didácticos y recursos educativos de los que vamos a disponer. Nuestras actividades requieren de pocos materiales ya que nuestra intención era que los niños disfrutaran del medio natural, sólo requerimos de alimentos para las actividades con comida.

Por último, la elaboración del proyecto debe ser evaluada con el fin de comprobar si se han cumplido los objetivos propuestos. Es un paso que debe hacerse para saber si todo el trabajo y el esfuerzo ha sido cumplido y sobre todo si se ha conseguido.

Todos estos pasos han sido fundamentales para la elaboración de nuestro proyecto. Los hemos seguido todos y ha sido muy interesante realizarlo para este colectivo, ya que se trata de salud en niños, y es muy importante para el futuro de ellos habituarse a una vida saludable, teniendo en cuenta la actividad física y la alimentación. Como he comentado justo al principio de la entrada, la elaboración de proyectos es algo muy importante para nuestro futuro trabajo. 

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